La Luna en prosa

Hace ya varios años, escribí un par de composiciones literarias libres dedicadas a la Luna. No recordaba que las tenía, ni por qué las había escrito; en realidad creo que en ese momento de mi vida, la Luna representaba a alguien, pero ¿a quién? ¿o acaso sólo estaba dóndome vuelo como inspirado escritor amateur?

Sea como sea, se las dejo a tod@s para que las lean, disfruten o destrocen a voluntad.

Luna 00
Estás ahí como todas las noches sólo que hoy brillas en plenitud ¿Me miras a mí acaso? Puedes ver que dentro de mí hay vacuidad, lo que en otrora fuese mi reino, ahora es un paraje desolador.

¿Puedes darme un poco de ti? Puedes compartirme tu brillo de fina plata? Tú que siempre miras con ternura la Tierra y tú que por eras has sido el destino e inspiración de los hombres y regidora del destino de las civilizaciones.

¿O es que acaso estás en pena? ¿Qué ocurre cuando das la espalda al planeta para observar a las estrellas más allá? ¿Es que miras a donde no alcanzas por estar cautiva orbitando a aquellos que te amamos? ¿O es que piensas tranquila en la interminable persecución entre tú y el Sol, eternos enamorados condenados a casi nunca compartir el mismo cielo, juntos, al mismo tiempo?

No pienso molestarte más, ya que sé que tú tienes tus cosas, sólo me quedaré aquí un rato más en la noche para poder admirarte y maravillarme como lo hicieron aquellos que te vieron brillar en el cielo la primera vez.

Luna 0.2

He vuelto sólo para ver que te vas
¿Partes para renovar tu luz?
¿O lo haces para no regresar?

Has conseguido al fin al Sol alcanzar
Y quieres ahora que se consume su legítima unión
Que la Eternidad les depara en otrora

Te veo partir y escucho mis voces dentro
Que se burlan diciendo que te hemos perdido
Y cantan la triste melodía de despedida
Como cuando un hijo se separa de su madre

Al final, sólo me quedo yo, sin tu brillo argento y azur
Al final, ya no tengo miedo, salvo a la herida de una flecha rota