Yo crecí con DINOSAURIOS

-"Quiero una pijama de dinosaurios". Fue lo que le comenté a Alvear en una conversación. Ya los dinosaurios no están de moda, por ello escasean en las pijamas. Se pueden ver en algunos juguetes, algunos aparadores, pero al parecer, ese frenesí prehistórico que existía en mis épocas de infancia, ha desaparecido.

Para los que vivimos los años 80 y 90 en su máximo esplendor, nos es común y familiar hablar de dinosaurios; las técnicas de paleontología empezaron a mejorarse, se volvió una carrera de moda, era común también que los que vivíamos en provincia buscáramos fósiles en zonas que fueron habitadas por seres prehistóricos. Por eso mismo, los juguetes, la ropa, artículos y demás items estaban estrechamente relacionados con estos réptiles en aquel entonces (ahora resulta que están más emparentados con las aves).

Yo era un dinosaurio, a veces un veloz Raptor, a veces un gigantesco Bronto, a veces un acorazado Stego, pero nunca me gustó ser T-Rex,  los brazos cortos siempre me dieron múscura. Qué se podía esperar de un niño que creció con dinosaurios, qué se podía esperar de un niño que fue marcado por los gigantes de los que poco se sabe aún.Yo que crecí con dinosaurios les presento a mis amigos:

• Pie Pequeño en busca del valle encantado: Uno de los trabajos más bellos en cuanto a animación se refiere. Una historia fuerte, un dino huérfano, la promesa de una tierra imperecedera y una amenaza inminente. Una saga que se desvirtua después de sus 12 secuelas.

• Dink el pequeño dinosaurio: Una serie Wannabe de Pie Pequeño, que toma a los personajes de la saga anterior, los cambia ligeramente, pero los deja reconocibles para ser agradable a los ojos de los fans y no ser infame para los más fanáticos, a pesar de todo eso, era una serie de sólo 2 temporadas pero que tenía capítulos muy divertidos, una muy buena razón para ver Caritele en las mañanas.

• El Carisaurio: El magnífico patiño de Adriana de Castro en el programa infantil de los sábados de TV Azteca. Una botarga demasiado sencilla, un personaje mudo, al que posteriormente se le asignó más presupuesto y lo dotaron de mejores materiales, un silbido ñerísimo y una camisa tipo Miami Vice. Todo fue fantástico hasta que le pusieron una puta voz tipo Elmo que lo hacía ver como un personaje que tuvo un retraso mental repentino. Lo odié desde ese momento. Pero jamás olvidaré el Carisaurio que chiflaba.

• Denver el último dinosaurio: Una serie divertida, en la cual un dinosaurio sobrevive a la extinción, es encontrado por un grupo multiracial de chicos de Los Ángeles que le enseñan cosas sobre patinaje y Rock and Roll. Con un mensaje de amistad y un excelente soundtrack, otra buena opción para pegarte a la tele.

• Dino Riders: Todo comenzó como una forma de hacerle publicidad a una línea de juguetes; Dinosaurios con armas futuristas, era una gran idea y así nació esta serie de sólo 14 capítulos, debo confesar que me encantaba y que la publicidad hizo que mis padres me compraran varios de los juguetes. Mi gran decepción es que siempre quise al T-Rex, se los pedí a los Reyes Magos y en su lugar me dejaron al Brontosaurio. Pocos, muy pocos en realidad recuerdan esta caricatura, y si tuvieron los juguetes recordarán que había pequeños comics dentro.

• Dinosaurios de Disney: Una de las series que más me ha hecho reir en toda mi vida, una respuesta directa a la popularidad de los Simposon, Disney y Jim Henson se unen para dar vida a unos magníficos personajes, clichés, pero a la vez únicos. Una serie que trata de la vida, de la gente, de los problemas y dilemas (siempre tipo parodia) y que inclusive hace ligerísimas referencias sexuales (la noche de miércoles donde Earl y Fran tenían sexo). Inclusive hay un espisodio donde parodian al Exorcista que debo decir, me asustó de verdad, en serio. Jamás olvidaremos al bebé Sinclair, la camisa roja a cuadros de Earl y los gritos de Richfield. 

• Dinoplatívolos: Horrendo nombre para la serie DinoSaucers; una de esas grandes caricaturas que tenían la combinación ganadora de Dinos+Armas+Tecnología. Dos bandos enemigos de una raza de dinos muy avanzados eligen a la Tierra como campo de batalla. A diferencia de Dino Riders, los personajes principales son los dinosaurios y su conflicto de herbívoros vs carnívoros; los humanos pasan a segundo plano siendo sólamente personajes que apoyan la serie y las acciones de los dinos.

• Jurassic Park: Qué más puedo decir de la que en sus tiempos fuese la más grande película de animatronics de todos los tiempos. Por fin dinosaurios que parecían ser de verdad, que corrían fluídamente, que interactuaban con los actores y que devoraban y destruían cosas. Al igual que con Pie Pequeño, las películas posteriores echaron abajo a esta saga de la que hubo de todo, desde posters en el Danesa 33 hasta videojuegos. T-rex se pregunta si habrá alguien en ese auto.

• Chicos, estamos de vuelta (We're back): Una película de Spilberg, donde un profesor con una máquina del tiempo viaja a la época de los dinos, les da un ceral que los hace inteligentes y los lleva a Nueva York de los años 90 para que los niños los conozcan. Ahí además de ayudar a un par de niños a solventar sus problemas de pubertos, derrotan al malvado hermano del profesor. Amaba esta película hace tiempo, y hace poco la volví a ver y  no me gustó tanto como recordaba. Sin embargo la canción tema me siguió pareciendo fantástica. 

• La Tropa Rex: Esta caricatura fue una respuesta al Boom causado por las Tortugas Ninja, básicamente era lo mismo, pero con carismáticos dinos que cuando no salvaban a la ciudad vestidos con sus trajes de héroe, cantaban en un club nocturno con traje de etiqueta. Lo mejor de la serie era su dinamismo y su canción de opening,  además del excelente trabajo de doblaje que se hizo acá en México, ojalá los recuerden.

Y si con todo esto y más crecí, cómo esperaban que no quisiera una maldita pijama de dinosaurios a estas alturas.